lunes, 23 de noviembre de 2009

Sueños detrás de una lágrima

He venido ha hablaros de sueños...
Aquellos pensamientos que nos llevan a realizar cosas increibles. Cosas que nuestro subsconciente no quiere que hagamos en el mundo real. ¿Sabeis por qué? Tiene miedo. Todo se trata de valor. La vida. Todo lo que hacemos en ella, son unas pruebas de valor que tenemos que ir superando día a día. La decepción, el fracaso, el odio, la arrogancia, el miedo... Si consiguieramos encontrar valor en cada uno de todos aquellos retos que nos ofrece la vida... dejaría de haber sueños. En parte sería bonito, poder vivir siempre como habíamos deseado... Pero... Algo falla. No tenemos metas. No tenemos Sueños. Nuestra vida es tan perfecta, que no buscamos la necesidad de nada más. Es aburrido. ¡Exacto! Eso es lo que falta... la chispa. Aquel condensador de fluzo que hace que hagamos lo imposible por conseguir algo, incluso aunque ese algo sea insignificante. Pero es nuestra meta... nuestro sueño... Pero nuestro. Aquello por lo que queremos luchar. Por lo que seriamos capaces de dar la vida para conseguirlo.
Esto me llega a plantearme...
El amor ¿ es un sueño imposible?

domingo, 15 de noviembre de 2009

Detras de cada cosa

Tras una risa desesperada...
Un llanto.

Y tras un llanto desolador...
La espera.

Y tras verle fugazmente...
La desesperación.

Y tras soñar con su sonrisa...
La tristeza de ver que no está a tu lado.

Y tras una canción de amor..
Un llanto de esperanza.

Y tras un lamento..
Alguien con quien hablar.

Y tras una mirada...
Un mundo.

Y tras una amiga...
Tu vida...

sábado, 14 de noviembre de 2009

Tumbada en un raido sofa

Alicia tiene sueños. Uno de ellos es poder volver a estar al lado de aquella persona. Otro es escuchar de nuevo su voz. Otra es caer en sus brazos. Otra es morir por un beso suyo.

miércoles, 11 de noviembre de 2009

Abrazando a un oso de peluche

En que piensas cuando te digo...

¿Noches de ensueño y Besos amargos?

A mi solo me viene una cosa a la mente...


domingo, 8 de noviembre de 2009

Respuesta tras respuesta

-¿Dónde estamos?
-Allá donde convergen nuestros sueños.
-¿Debajo de la almohada?
-Exactamente. ¿acaso existe otro lugar?
-Donde el cielo no está sobre nuestras cabezas y el mañana es eterno.
-En aquel lugar no se sueña. Hay que estar muy muerto para poder tener sueños allí.
-¿Alicia? ¿Tienes miedo?
-Todos los días. ¿Tú no?
-Solo tengo miedo si ese día no estoy entre tus brazos.
-¿No echas de menos el mar?
-Solo le noto un poco más lejos de mi cada día.
-Entonces igual que aquel ángel.
-¿Hablas de él?
-¿De quien sino?
-Hay tanta gente hoy día.
-Nadie como él.
-Nadie como él.
-¿Piensas igual?
-Confío en ti
-No deberías
-Confío en ti, mas que en la muerte.
-¿Crees que ella te mintió?
-¿Tú no?
-Beatrice, solo se que la tierra no es plana como un pizza.
-Hmmm, pizza...
-Recogete la baba...
-Me tientas tanto.
-¿De qué hablábamos?
-¿De pizza?
-No tonta...antes.
-De la muerte.
-La odias demasiado, para ser alguien que conoces tanto.
-Mas quisiera yo no saber nada de ella.
-Tengo miedo. Abrazame
-Te abrazo. ¿No hablaste con él?
-¿Antes o después de su muerte?
-No sabía que pudieras hablar con los vivos.
-Aun no.
-¿Entonces?
-Después no me atreví a mirarle.
-No seas cruel.
-Morir por nada es absurdo.
-Y si no le ayudas, más se sentirá él.
-¿Crees que querrá verme?
-¿Ves la posibilidad de que no quiera?
-¡Siempre respondiendo con preguntas!
-Quiero pizza.
-Y yo
-¿Comemos eso hoy?
-Claro Beatrice
-¿Quieres que deje de abrazarte?
-Nunca..

sábado, 7 de noviembre de 2009

La noche era demasiado oscura

Alicia caminaba por la calle. Tenía miedo a cada paso que daba. No le gustaba caminar sola, pero comprendió a la larga que era mejor estar sola.
La gente me hacía daño, o simplemente no querían estar a mi lado.
Comprendí que la soledad implicaba a la larga felicidad.

Caminar por el bosque...sola... no es aconsejable.
Lo hacía todas las noches.
Una, un Lobo se me acerco.
Era un Lobo de pelo oscuro, y ojos grandes. Sentía como me miraba.
Me cautivo con su mirada.

"Que raro..."

Me acerqué a él, y me agaché. Se acercó del todo a mi, y posó su hocico en mi cara. Estaba húmedo, pero era tan acogedor. Levante las manos y las acerqué a su pelo. Quería tocarle, quería estar con él.
Quería que todo lo que me rodease fuera parte de él.

"Que estupidez" Me dije.

Me levanté bruscamente, volviendo a la realidad. No debía estar con nadie.

"Maldito Lobo"



Me di la vuelta, y note como este me seguía. Y no pude evitar llorar y girarme para volverle a abrazar de nuevo.